GÉNESIS Y PERDURABILIDAD DE LA CATEDRAL DE GUANTÁNAMO
Santa Catalina de Ricci, es el nombre de la primera Iglesia edificada en la ciudad de Guantánamo, obra que a pesar de las modificaciones arquitectónicas acometidas desde entonces, conserva su estilo, formado por tres naves e igual cantidad de puertas.

Los orígenes del santuario son atribuidos al crecimiento poblacional, los vecinos solicitaron la construcción del templo y la permanencia de un sacerdote, para evitar viajes a la parroquia de San Anselmo de Tiguabos, donde se realizaban los oficios religiosos.

Donaron el terreno para la iglesia, en el corazón de la ciudad de Guantánamo, Pedro Manuel Pérez, Belisario Rey y Lorenzo Jay, área que abarcó también el Parque José Martí, pero la construcción fue paralizada durante dos años, ya que algunas familias exigían que la Iglesia Santa Catalina de Ricci naciera en El Saltadero, núcleo fundacional de esa urbe.
La catedral de Santa Catalina de Ricci, concluyó el quince de julio de mil ochocientos cuarenta y dos y es bendecida el día veintisiete, en conmemoración del aniversario de la muerte del primer párroco y maestro José Andrés Rodríguez Luna.

La cronología del inmueble, incluye una demolición, su rescate y reparaciones diversas, no obstante, el triunfo de la Revolución garantizó el amparo de ese tesoro arquitectónico respetando el proyecto original.

La Iglesia Católica Santa Catalina de Ricci, en la ciudad de Guantánamo, posee un detalle exclusivo: el remate del falso techo, equivalente a construcciones religiosas del siglo dieciséis cubano y en torno a la edificación, gira y bulle la vida.